domingo, 11 de julio de 2010

Porque yo en la vida he tenido suerte

Quizás no comprendas hoy, amada razón, aquello que al parecer contradice nuestros principios. Es tan difícil concordar esto que parece nacer desde adentro, con lo que mi entendimiento llega a comprender. En este juego tan duro, en esta final del mundo donde en el suplementario parece que no queda ni una esperanza y que todo esta perdido, te encontré a vos.
Hay quien dice que no existe la felicidad, quien cuestiona al amor, a la alegría. Quién soy yo para decir que esto no es cierto ? A mi la vida, para muchos, no me ha demostrado que eso fuese posible.. pero en verdad, en este momento soy feliz. Tengo más motivos para reir, que para llorar al margen de que los segundos quizás sean más importantes y/o fuertes que los primeros. Pero sonrío porque tengo quién me recuerda como hacerlo. Me rió porque tengo quien me haga reir. Sigo, porque tengo quien me impulse a eso. Continuo en este juego, por me dirige el mejor de todos los directores técnicos que alguna vez pisaron este campo de juego.
Creo en la felicidad, en el amor y en la alegría porque en vos la veo reflejada siempre que te veo. Creo en la felicidad porque con vos soy feliz; en el amor, porque te amo; en la alegría.. porque cuando te fuiste la perdí y ni bien apareciste me la trajiste de vuelta.

Como siempre y para siempre.